A nosotros
nos gusta darnos masajes, de hecho, son muchos los fines de semana que las
tardes-noches nos las dedicamos a nosotros.
Primero un
bañito relajante de media hora con sales, luces de vela, música agradable y
mucha tranquilidad. Después ya entramos en materia y en la misma cama nos
hacemos unas sesiones de hora y media o dos horas de masaje. Primero el masaje
propiamente dicho y después… que queréis que os diga… pecamos de nuevo.
Os dejo un
librito que está muy bien explicado con imágenes para los que no conocéis esta
actividad placentera y os introduzcáis de forma amena en este morboso juego.
Y os prometo que pronto os dejaré unos vídeos de como se hace un masaje... en condiciones!!
Cape Diém!
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